Latina

Situada al sur de la región de Lacio, Latina fue fundada en 1932 bajo el nombre de Littoria en el corazón de las Lagunas Pontinas. Con el tiempo se ha convertido en una ciudad octogonal de calles rectas que parten de la Plaza del Pueblo, en torno a la cual podemos visitar algunos palacios únicos como el de la Prefectura, el Municipio y la Cuestura. Este tipo de edificaciones se repiten con frecuencia con magnificencia como el Palacio M, con forma de esta letra en representación del apellido de Mussolini.

Lugares dignos de visitar

La historia también la encontramos en los muros de algunos edificios religiosos como la Catedral salesiana. El resto del encanto del paisaje lo protagonizan la naturaleza y el mar, con espléndidas costas y localidades medievales enclavadas en el Mediterráneo. Algunas de estas ciudades costeras son la de San Felice Circeo (una mezcla entre modernismo y edad media), la de Formia (con playas presumidas) y la de Sperlonga, donde las casitas se descuelgan hacia el mar y hay grutas abiertas como la de Tiberio donde se rescataron restos arqueológicos impresionantes del siglo I que hoy descansan en el Museo Arqueológico Nacional de la ciudad.

Legado arquitectónico

Si nos apasiona todo esto de los restos arqueológicos de época romana, entonces no podemos dejar de visitar Cori, Sezze, Maenza, Monte San Biagio, Priverno y Ninfa. En estos bellos lugares descubriremos los más bellos jardines del mundo, fortalezas históricas, iglesias medievales, abadías magníficas como Fossanova y Sermoneta y monumentos naturales.

Finalmente, tampoco os perdáis el Templo de Júpiter Anxur, el Palacio Venditti y el Duoma medieval en la ciudad de Terracina. Te maravillarás de todo este legado arquitectónico y disfrutarás de las increíbles vistas de este paraíso italiano donde además degustarás los productos típicos de la zona: la mozzarella, el marzolino, el jamón de Bassiano o las aceitunas de Gaeta.